
En el momento del parto el tiempo es crucial el trabajo coordinado de dos o más profesionales resulta decisivo para la buena resolución de un viaje que acaba de empezar. Usar protocolos adecuados basados en los últimos conocimientos científicos, aplicarlos con exactitud y apremio nos llevará a unos estándares de calidad en nuestro desempeño profesional.
Muchas son las maternidades donde el equipo básico está constituido por una matrona y una auxiliar de enfermería, siendo evidente que debemos poseer unos saberes adecuados para actuar de manera eficaz y pronta. Otras veces colaboraremos con otros profesionales: obstetras, pediatras, anestesistas, entre otros.
Cuando hablamos de normalidad en el momento del parto, a nadie se le ocurre ningún tipo de digresión que interrumpa la adaptación del neonato a un nuevo medio, su sistema respiratorio y circulatorio, principalmente serán modificados para este nuevo proceso. Cambios que debemos asegurarnos que se inscriben dentro de unos estándares y que no conllevan ninguna disfunción añadida. Establecer unas sencillas pautas de actuación ante un parto eutócico, con un neonato dentro de la normalidad facilitará enormemente nuestro quehacer diario.
Tras nacer e iniciar su primera respiración, el neonato, provocará un cambio de presión en las vías respiratorias (se produce una caída brusca e intensa de las resistencias vasculares pulmonares), lo que induce a cerrar algunas conexiones fetales y desviar el flujo sanguíneo, el nuevo ser no dependerá jamás de otro medio que no sea el actual. Por otro lado, el sistema circulatorio se ve modificado (consecuencia del inicio de la respiración y el cese de la dependencia placentaria), ahora se transforma en un circuito en serie donde las resistencias periféricas aumentarán y las pulmonares descenderán, favoreciendo una adecuada perfusión a los tejidos y una elevación del oxígeno en la sangre arterial.

Estimularemos al recién nacido para que se produzca el llanto del mismo, lo que facilitará la respiración y expulsión de secreciones. Pinzaremos el cordón umbilical y anularemos la dependencia que tiene con la placenta a nivel nutritivo y respiratorio (dicho clampaje podrá realizarse de manera precoz o tardía, con unos minutos de demora). Se clampará el cordón umbilical, dejando entre dos y tres centímetros hasta el abdomen (manteniéndolo limpio y seco), pondremos el pañal y especialmente evitaremos la pérdida de calor, bien tapado o bajo la cuna térmica.
Respecto a la termorregulación, el neonato se encuentra mojado por el líquido amniótico y podría enfriarse, repercutiendo negativamente en su estado general y adaptativo, por ello debemos evitar este trauma térmico consecuencia de la pérdida calórica por evaporación, secándolo, colocándole un gorro y envolviéndolo en paños calientes, también podremos situarlo bajo una fuente de calor (cuna térmica) o piel con piel con su madre, lo que mejora la interacción con la madre, facilitando el vínculo materno-filial además del posible inicio de la lactancia.

Tras nacer se realiza el test de Apgar, que nos orientará sobre la capacidad adaptativa del recién nacido al mundo extrauterino, que se llevará a cabo al minuto y cinco minutos tras ser expulsado del claustro materno. Los signos a valorar serán, el tono muscular, la frecuencia cardiaca, la coloración, la respiración y la respuesta ante estímulos.
Realizaremos una evaluación sencilla del neonato en la sala de partos, de su normalidad o desvío de la misma, tras los dos pasos mencionados (control térmico y adaptativo) se llevarán a cabo una serie de procedimientos que podrán realizarse en el paritorio y/o sala de neonatología (dependerá del centro), y ¿Cuáles son?
Se realiza un examen físico breve en busca de signos claros que indiquen que el bebé está sano. En los minutos y las horas siguientes, se harán otros procedimientos, que pueden realizarse en la sala de partos, en la sala de neonatología o en la habitación de la madre. El lugar dependerá de la política del hospital y del estado general del bebé. Aquí se enumeran algunas cosas que le controlarán o le harán al bebé: temperatura, frecuencia cardíaca y frecuencia respiratoria, además de los datos antropométricos, peso y longitud, amén del perímetro cefálico, para valorar si de adapta a la edad gestacional que refiere la historia obstétrica, valorando la normalidad de la misma. Debemos considerar que las situaciones extremas, macrosomía o bajo peso pueden llevar de la mano serios problemas, principalmente respiratorios y metabólicos, lo que puede conllevar cuidados singulares.
Antes de que el bebé salga del área de partos, a la madre y al pequeño les colocan brazaletes de identificación con números idénticos, certificando la hora de nacimiento, indicando el número de historia y habitación, fecha y hora de alumbramiento. Recogeremos también las huellas de madre e hijo para posible verificación posterior.
La participación activa en el parto de la madre y su pareja los ayuda a adaptarse al hecho de ser padres.

Resumiendo, podríamos establecer una serie de pautas sencillas y eficaces en el momento del parto:
- Valoración previa de la normalidad del mismo y del neonato que está por nacer.
- Tras el nacimiento;
- Control térmico del recién nacido, con fuente de calor y especialmente piel con piel con la madre (estimulando el vínculo afectivo),
- Control adaptativo mediante el test de Apgar, realizaremos masaje suave y en casos especiales realizaremos aspiración por narinas y boca.
- Identificación del recién nacido y la madre anotando la hora de nacimiento y con recogida de las huellas de ambos.
- Valoración de la normalidad del neonato.
Bibliografía
- Cuidados del recién nacido en la sala de partos. Disponible en; https://myhealth.ucsd.edu/Spanish/RelatedItems/90,P05975
- Consolini, D. MD, Thomas Jefferson University Hospital. Evaluación y atención del recién nacido normal. Disponible en: https://www.msdmanuals.com/es-es/professional/pediatr%C3%ADa/el-cuidado-de-los-reci%C3%A9n-nacidos-y-los-lactantes/evaluaci%C3%B3n-y-atenci%C3%B3n-del-reci%C3%A9n-nacido-normal
- Cuidados del recién nacido. Disponible en: https://mye2016.com/cuidados-del-recien-nacido/
Autoras: Elena García Morán y Mirian García Planelles
