Puerperio

Ha sido un parto costoso pero por fin está aquí. Ya lo tienes en tus brazos, y este momento se convierte en un punto donde cambia la relación que tienes con tu hijo, que se reforzará con el tiempo y el vínculo afectivo que estableces con él.

1477156793955

Aunque todas las atenciones se dirigen a él no debes olvidar que el primer mes posparto es especialmente importante en tus cuidados. cuidados-posparto

A los aspectos físicos, se unen modificaciones síquicas y hormonales que hacen que te sientas distinta, eufórica y triste, y necesitas mimos. Confía en ti, en tus capacidades de administrar cuidados a tu hijo.

Durante la primera quincena posparto existe un período de desequilibrio, que se considera normal, ante la aparición de nuevas responsabilidades, el cansancio lógico de esta etapa y la adaptación a un nuevo rol, expresar tus sentimientos y pedir ayuda a tiempo pueden mejorar esta situación.

El puerperio es el periodo que va desde la salida del feto, y la placenta, hasta el retorno del organismo femenino a su estado previo al embarazo.

¿Cuánto dura y qué cambios se observan? Oscila entre las seis a ocho semanas, y durante este periodo de tiempo se producen una serie de cambios fisiológicos, especialmente la adaptación de la madre y el recién nacido a esta nueva situación.

Lo que si puedes constatar es como tu útero tras el parto, está más duro y se sitúa por debajo del ombligo, todo ello gracias a las contracciones que continúan produciéndose después de parir y que facilitan que disminuya el sangrado. Los loquios – secreciones de sangre y flujo – serán inicialmente sanguinolentos y ya durante la 2ª semana posparto adquiere un tono amarillento, e irán desapareciendo hacia la 3ª- 4ª semana.

Es recomendables la deambulación precoz, que previene las complicaciones tromboembólicas y facilita la eliminación urinaria e intestinal. La diuresis suele aumentar durante los tres primeros días, hasta que recuperes tu volemia normal.

Deberás aumentar la toma de líquidos y el consumo de fibra para evitar el estreñimiento y así aliviar las molestias si tienes hemorroides.

La colocación precoz del bebé al pecho – algo que se hace en el paritorio – favorece: la secreción de leche gracias a la liberación de prolactina, la producción de oxitocina con la consiguiente contracción uterina y el vínculo afectivo madre-hijo.

Por otro lado el alta hospitalaria se suele indicar a las 48 horas tras el parto y en el caso de una cesárea a las 36 horas, indicándote los cuidados que debes llevar a cabo en casa.

Las curas de la episiotomía se realizan dos veces al día, lavando con agua y jabón (o suero salino), secando bien la zona. Si utilizas antiséptico que no contenga yodo.

La ducha será diaria, 24 horas tras el parto y en el caso de una cesárea a las 48 horas secando la herida y cambiando el apósito, no debes bañarte mientras tengas sangrado vaginal.

Respecto a las mamas, antes de colocar al lactante al pecho lávate las manos. Pueden aparecer grietas en el pezón normalmente a los dos o tres días posparto, ¿cómo tratarlas? Con una adecuada técnica, introduciendo toda la areola en la boca del lactante, con pomadas cicatrizantes o analgésicas, aunque estas se deben retirar antes de amamantar y esta fricción puede provocar más molestia. Quizás el uso de productos inocuos y oleosos, como el aceite de caléndula te irá mejor pues no precisa retirarse. En otros casos el uso de pezoneras alivia las molestias a la hora de dar el pecho.

Las relaciones sexuales deben evitarse mientras perdure el sangrado vaginal y/o la episiotomía no haya cicatrizado o moleste. Y no olvides que la lactancia no es un método anticonceptivo seguro.

El ejercicio físico será suave y progresivo (gimnasia hipopresiva), evitando los que aumentan la prensa abdominal .

Deberías consultar con tu médico y/o matrona, principalmente si aparece fiebre (temperatura mayor de 38ºC), hinchazón de piernas, tumoración dolorosa en mamas, signos de infección en la episiotomía (enrojecimiento, dolor, drenaje purulento, etc) o en la herida de la cesárea, mal olor de los loquios y dificultad o problemas respiratorios.

El final del puerperio es algo impreciso, aunque algunos autores coinciden en subrayar que se produce cuando se vuelve a tener la menstruación, recordándote que esta se relaciona con la lactancia materna.

1477208744043